Esta frase fue
pronunciada por el P. General en su primera homilía al referirse a la labor
vocacional de la Compañía, además, nos invitó a orar y trabajar en lo que
definió como un “complejo empeño”. Desde el noviciado hemos tratado de motivar
procesos que lleven a otros jóvenes a preguntarse sobre el sentido profundo de
sus vidas, haciendo memoria viva de Alberto Hurtado: “Un fuego que enciende
otros fuegos”. En ese orden de ideas, preparamos la visita anual de los
candidatos a nuestra casa. Pero la relación fue otra, fueron ellos quienes con
su chispa incendiaron, no solo por la cantidad, sino por su energía el
Noviciado San Pedro Claver.
El 10 de mayo en
horas de la tarde los teléfonos empezaron a sonar anunciando lo que venía, 10
jóvenes de distintas partes del país (Distrito Capital, Miranda, Monagas,
Mérida, Falcón, Zulia, Táchira, Bolívar y Lara) llegaron a Barquisimeto para
encontrarnos en un ambiente de fraternidad que nos permitió a todos celebrar la
vocación. Así compartimos a casa llena 5 días en el noviciado, hicimos las
labores de aseo que cotidianamente realizamos, practicamos deporte, asistimos a
pastorales y les mostramos lo que normalmente hace un novicio jesuita.
Todos
recordábamos días antes las dudas que normalmente surgen en el proceso de
candidato. Este año no fue la excepción, los muchachos trajeron muchos
cuestionamientos a los que tratamos de dar respuesta desde lo que somos.
Insumos que sirven a ellos en su proceso de discernimiento y que les permite
acercarse a la realidad de esta casa, que sería la primera suya dentro de la
Compañía de Jesús. Además nos ayuda a nosotros, también, para seguir haciéndonos
preguntas y dialogarlas con Dios durante este tiempo de noviciado.
Hubo momentos
particularmente especiales:
1.- Visita a las
CEB`s: El jueves en la noche fuimos a la Carucieña, donde normalmente
participamos de las comunidades de base. El encuentro sencillo con la gente nos
permite acercarnos a la Iglesia en salida. Allí estuvimos junto a mujeres y
hombres que durante años han participado en procesos socio-comunitarios y
religiosos animados por Jesús de Nazaret.
2.- Noche
comunitaria: No todo fue trabajo, aprovechamos el espacio para compartir en un
ambiente más distendido y alimentar nuestros lazos comunitarios, esos que nos
hacen fraternos, signo del Reino y finalmente amigos en el Señor.
3.- Pastoral en
Pavia: El sábado en la tarde, luego de una mañana de alegría profunda por
compartir la vocación con otros jóvenes larenses, nos fuimos a Pavia, a los
sectores -Tapa de Piedra, Padre Diego y Entrada de Piedra Colorada- que
visitamos cada fin de semana. Una vez más nos recibieron las personas que en
este tiempo se han hecho nuestra familia y con emoción dieron la bienvenida a
estos 10 jóvenes que hoy disciernen la posibilidad de entrar en la Compañía de
Jesús.
Además, el P.
Fidel tuvo la oportunidad de mostrar a los muchachos los elementos sobre los
que se construye el noviciado en esta Orden religiosa y echar un vistazo a la Congregación
General 34. Compartimos con ellos el ritmo habitual de la casa, la materia de
nuestros estudios, lo bonito de profundizar en nuestra espiritualidad desde la
visión de Ignacio y el combustible que le dan las pastorales a este proceso que
para algunos está cercano a dar un nuevo paso con los votos en septiembre y
para otros supone continuidad cotidianamente nueva.
El domingo, tras
compartir el almuerzo, los muchachos volvieron a sus comunidades. Desde el
noviciado esperamos que este proceso bonito iniciado por Papá Dios termine
conduciendo a nuestros hermanos a la felicidad. Que el Dios de la vida los
acompañe en estos meses de discernimiento profundo, que puedan afinar su oído
para escucharle en el silencio de su próxima experiencia, la de Ignacio, la de
los Ejercicios Espirituales. Y si el buen Dios los trae a esta casa, aquí
esperamos por ustedes sus hermanos. Pedimos a todos también orar por los jesuitas
para que puedan acompañar a todos los que por Voluntad del Padre se preguntan
por esta mínima Compañía de Jesús. Y bueno, como lo dijimos el miércoles en la
bienvenida: Aquí comienza todo para “hacer
verdaderos jesuitas”. Arturo Rey SJ / Jesús Linares SJ
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